Política: un trabajo para toda la vida

La semana pasada, el diario El País publicó un reportaje, que fue muy comentado, aglutinando a algunos de los supuestos dirigentes del futuro para el PSOE. Todos ellos ocupan cargos públicos y todos oscilan entre los 30 y 40 años, grosso modo. Se supone que, ante la debacle vivida por el PSOE en este año 2011, deberían representar algún tipo de esperanza de cambio, de viraje sustancial, respecto de la estrategia política que, además del impacto que evidentemente ha tenido la crisis económica, les ha llevado a la situación actual.
Pero no teman: el futuro de la izquierda en este país tiene bien aprendida la lección. Ni una palabra más alta que otra. Sí, pero no. Lo hemos hecho todo bien, pero hay que cambiar. Ahora… ¿Cambiar, exactamente, qué? Pues no se sabe muy bien. Palabrería vacua.

Si nos acercamos someramente a los perfiles de los dirigentes del PSOE entrevistados, una gran verdad aflora enseguida: prácticamente no han trabajado en su vida. Y, si han trabajado, es con puestos laborales relacionados con su militancia en el partido. En concreto, Eduardo Madina ha trabajado como técnico en el Parlamento Europeo. Casi todos los demás, es decir: Susana Díaz, Pilar Alegría, Leire Pajín, Emiliano García-Page, Óscar López, Laura Seara, César Luena,… no han trabajado nunca en nada ajeno a sus puestos en la política. La única excepción a la regla es el economista Juan Moscoso, curiosamente la persona de mayor edad de todos los seleccionados en el reportaje (45 años).

Este perfil de político profesional, que entronca toda su vida laboral en torno al partido, es, por decirlo claramente, una plaga que está destrozando, generación a generación, cualquier capacidad de interlocución con la sociedad civil que pudieran tener los partidos políticos. Y ello por los siguientes motivos:

Nunca ejercen ningún trabajo porque el partido les coloca antes. Los jóvenes que se acercan a la política, especialmente en los grandes partidos, si se lo curran en la nefanda lucha interna y logran medrar, consiguen muy rápidamente algún puesto remunerado, bien como representante público, bien como asesor o laborante en empresa pública colocado a dedo por el partido. Y no hablamos de puestos mal remunerados, sino de sueldos en torno a los 2.000 – 3.000 euros mensuales limpios desde muy pronto. Y, además, por trabajos a menudo poco definidos o consistentes en trabajar para el partido, es decir: lo que ya hacían antes con la esperanza de que el partido les colocase. En esos términos, no es extraño que se pregunten… ¿cómo voy a trabajar por 500 € al mes en un trabajo de los de verdad?

Como toda su vida laboral depende del partido, se agarran con desesperación a él. Fuera no les aguarda más que el vacío. Y, conforme más años pasan en el partido, peor es la cosa.

Para controlar el partido, han de estar dedicados en exclusiva a él, y desde muy pronto. Los dirigentes políticos que hoy tienen 40 años o menos, que ya han vivido toda su vida (o prácticamente toda) en democracia, llevan toda su vida en el partido, al que acceden a través de sus juventudes y/o organismos adyacentes (como los sindicatos universitarios). Una vez entran, y sobre todo cuando comienzan a ver un beneficio práctico de tanto sacrificio por el partido, se consagran a él por completo, con el fin de socavar a sus rivales e ir haciéndose hueco en el organigrama.

– Correlativamente, aquellos que sí que tienen una carrera profesional ajena a la política tienen menos tragaderas que los profesionales, y menos tiempo. No se les caen los anillos, en un momento determinado, por dar un portazo y largarse. Los profesionales no pueden dar un portazo a ningún sitio. Por eso son maestros de la componenda y el deslizamiento discursivo, sin salirse jamás de la norma, no vaya a ser que pierdan el chollo.

– Por último: los profesionales de la política están más expuestos a la corrupción, en sus diversas facetas, de empresas o particulares que ofrecen un puesto laboral (generalmente algún puesto-chollo en un consejo de administración para no hacer nada) a cambio de determinados favores políticos, concesiones, etc. Fundamentalmente porque esa es su única vía para conseguir trabajo fuera de la política: conseguirlo gracias a ella.

Lo anterior, ha de quedar claro, no constituye, por mi parte, un intento de desacreditar la política de partidos. Pero sí de criticar en lo que se está convirtiendo los partidos políticos a marchas forzadas. En agencias de colocación privilegiada de sus militantes dedicados en cuerpo y alma a que el partido les coloque a cambio de sus sacrificios, que empiezan a muy tierna edad, dispuestos a todo y además (porque hay que decirlo también, con las obvias excepciones), con la preocupante colusión añadida de dos características más. Los profesionales de la política suelen ser, desde su más tierna infancia:

Muy chulos: por alguna razón que se me escapa, pero que muy habitualmente puede verse en los cachorros de los partidos políticos, su manera de comportarse en el espacio público, de hablar con los demás, y de entender la política, suele ser de una arrogancia, intolerancia y agresividad preocupantes. Véanse, en el espacio valenciano que conozco mejor, los casos de los sindicatos universitarios Aveu y Campus Jove, viveros privilegiados de PP y PSOE, respectivamente.

Muy flojos: Como ya hemos visto, la participación política es un fin en sí mismo. Y el fin no es transformar la sociedad, ni aplicar ningún tipo de perspectiva ideológica a los problemas del entorno. El fin, claro y concreto, es este: colocarse. Todo lo demás da igual. Este cortoplacismo, esta bajeza de miras, suelen ir en consonancia con una formación intelectual y moral extraordinariamente pobres: ni leen nada, ni saben nada, ni se interesan por nada, salvo por mandar lo antes posible, el mayor tiempo posible y haciendo la menor cantidad de trabajo que sea posible. Casi todo su discurso es un compendio de frases vacías sacadas del argumentario del partido, que para algo es el demiurgo que les alimenta y da sentido a sus vidas.



35 comentarios en Política: un trabajo para toda la vida
  1. ¿Cómo lograría Pajín colarse en esa foto? Si la renovación del PSOE pasa por esta gente les auguro unas cuantas legislaturas en la oposición. Aunque Zapater no creo que llegase a cotizar un trienio como profesor universitario.

    UPyD obliga a trabajar fuera de la política un tiempo mínimo antes de acceder a ningún cargo público. Es un comienzo. Aunque luego ves los que hacen para estirar los estatutos en favor de Rosa Díez y piensas que todo es una puta mierda.

    Un saludo.

    Comentario escrito por Torcuato — 06 de diciembre de 2011 a las 8:39 pm

  2. Muy bien descrito. Estoy de acuerdo y voy a poner mi granito de arena desde el sur, lo que llamamos «El Cortijo» o «El Régimen». Lo bueno es que el ERE gigantesco del 22M al 20N (y en Andalucía se espera todavía marzo 2012) amenaza a toda esa generación de ni-nis con pasarlos a las oscuras y terribles realidades de la vida laboral española, de la que creían haber escapado para siempre.
    Enlace: http://tontosantajusta.blogspot.com/2011/06/el-tsunami.html

    Comentario escrito por Federico Relimpio Astolfi — 06 de diciembre de 2011 a las 8:52 pm

  3. Torcuato, a mi también me impacto mucho que Pajin hablara de renovacion…pero si ella es lo antiguo!!Con menos edad y mas pelo que rubalcaba pero son lo mismo.
    Pedazo de articulo, das en clavo y haces un retrato perfecto de lo que se está llevando por delante la politica española…son precisamente estos profesionales

    Comentario escrito por maria — 06 de diciembre de 2011 a las 8:53 pm

  4. El artículo de «El País» que citas, querido Guillermo, es sencillamente LA HEZ.

    Menuda intentona de colocar a la «chavalería» del PSOE en plan saldos…si de ahí tiene que salir el bienamado LIDER van aviados…toda una panda de jetas que no han pegado un palo al agua en su puta vida, ni bregando en la empresa privada ni mucho menos paladeando el desmierde de las instituciones públicas…eso si, batallando en las Juventudes de sus partidos por el preciado chollito…ahí no hay quien les gane.

    Por lo demás, un post excelente, realmente excelente. ¿Te has dado cuenta que cuando sueltas más bilis te salen mejor?

    PD. Creo que quedó bastante claro en LPR que «Campus Jove» no tiene nada que ver con el PSPV ;)

    Comentario escrito por Garganta Profunda — 06 de diciembre de 2011 a las 9:22 pm

  5. No por ir a contracorriente por el mero hecho de tocar los coyons, pero David Cameron y George Osborne son del mismo perfil, gente que sólo ha militado en política.

    Se por donde van las críticas, y estoy de acuerdo con ellas. Obviamente, gente con experiencia y mezcla sería mejor, pero tampoco la panacea, aún así hay que señalar que la idea de político profesional es una condición inherente de modernidad en la que es muy difícil concentrarse en varias cosas. Que por mucho que nos quejemos este tipo de personas van a estar siempre aquí, en mayor o menor medida, porque las condiciones de la sociedad presente lo exigen, además de problemas institucionales.

    Lo que quiero decir, es que no comparemos con una especia de pasado de idilio. Yo creo que es más problemas estructurales de la sociedad española que del político profesional, teniendo en cuenta las desventajas que este último tipo de modelo presentan.

    Comentario escrito por bordesinremedio — 06 de diciembre de 2011 a las 10:25 pm

  6. Buff, ¡¡¡ menos mal que has escrito este artículo!!!, cuando leí ese reportaje lo primero que pensé fue eso, ‘pero aqui, ¿quien trabaja?. Lo peor es que este montón de estómagos agradecidos ni siquiera perciban el. abuso que cometen.

    Supongo que el PP también tendrá los suyos ( de hecho, en Valencia hay ejemplos a montones) pero ver unreportajeasi,vendido como ‘la renovacion’ y ‘el cambio’ fue una tomadura de pelo.

    Como esto siga asi, no hay forma de arreglarlo.

    Genial, Guillermo, gracias.

    Comentario escrito por Bárbara — 06 de diciembre de 2011 a las 10:27 pm

  7. Sin duda alguna el post que has escrito, describe la realidad de nuestra clase política. No puede haber una verdadera renovación dentro de los partidos, porque ya desde dentro están antiguos. Es preciso que antes de incorporarse a la vida política, todos los que aspiran a tener un cargo público hayan pasado por la escuela del trabajo fuera de un partido político, para que cuando se termine la etapa de «servicio público» puedas volver a ganarte la vida con la profesión que ejercías antes de dedicar unos años a la sociedad.

    El problema de hoy en día es que los partidos de la «vieja política» van por un lado, y la sociedad va por otro, y cada vez el abismo que se abre entre ellos es más grande. Nos estamos convirtiendo en lo que Klingemman denomina demócratas insatisfechos.

    Comentario escrito por Esther — 06 de diciembre de 2011 a las 10:51 pm

  8. Sencillamente cojonudo. He vivido esa sensación en mi época universitaria de gentes prepotentes que nunca han leído a Zizek o no tienen ni idea de quién es Cortázar.
    A mi es algo que me preocupa, como simpatizante de izquierdas, es que como decía Marco Antonio de la Parra, necesitamos ascetas, es decir, gentes que piensen nuestra sociedad, pero que la piensen bien, que la conozcan desde abajo.
    En Valencia, como dices Guillermo, el caso es tremendo. No hay (casi) nadie que te dé confianza, todo el mundo vive pensando en el clientelismo. ¿Cuándo, en una sociedad como la nuestra, se podrá acceder a cargos de relevancia (director de un gran teatro, gerente de una empresa pública, etc), sin haber chupado rueda de un partido?

    Solo darte las gracias por este inmenso artículo. Gracias.

    Comentario escrito por gabkarwai — 06 de diciembre de 2011 a las 10:58 pm

  9. A mi facebook va. Verdades como puños, es la mediocrecracia mas total. Y lo digo con conocimiento de causa: conocí a Leire Pajín en 2007, cuando era secretaria de estado de cooperación, en un viaje a terreno. En el sarao que montó la embajada -instalado en el hotel más caro de Centroamérica-, un grupo de gente «asaltamos» a la susodicha y a Ma. Teresa Fernandez de la Vega para preguntarles por la censura que acababa de sufrir «El Jueves» (ya sabéis: «vicepresidenta, estoooo…¿cómo podemos llevar adelante un programa de fortalecimiento de la libertad de expresión si en España…?») Y en un momento dado, la ínclita Leire nos suelta: «El problema de la gente de nuestra edad es que piensa que tiene derecho a ganar 3.000 euros al mes y eso no puede ser, no hay trabajos así para todos». Alguien que estaba pillando 78.000 euros al año con 32 tacos, con dos cojones. Y es a lo que están acostumbrados, y encima piensan que en unos añitos, les tocará mandar a ellos. Pues van de culo, si se me permite la expresión.

    Comentario escrito por SinanPacha — 07 de diciembre de 2011 a las 12:46 am

  10. Plas, plas, plas. Yo cambiaría «Política» por «Borbonear» en el título, y añadiría la obsesión de los protagonistas por «ayudar» a los medios de comunicación en el desempeño de su trabajo.

    Comentario escrito por popota — 07 de diciembre de 2011 a las 4:01 am

  11. Este artículo da en el clavo con lo que muchos sabemos y vemos en los grandes partidos, y en algunos pequeños también.

    Muchas gracias por dejarlo patente, a ver si aprenden de una vez, que lo veo muy difícil, que la política debe estar al servicio de la ciudadanía, y no al revés.

    ¡Cuanto nos queda por aprender de la democracia!

    Comentario escrito por Puesyo — 07 de diciembre de 2011 a las 9:44 am

  12. Pues sí.
    De todas las maneras leer Prisa sin reservas es un poco alegre… :)

    Comentario escrito por Carlos Arrikitown — 07 de diciembre de 2011 a las 10:37 am

  13. Me uno a los aplausos,
    El PP no está mucho mejor pero, al menos, tiene una base de donde tirar para encontrar cargos. En el PsoE, el serpiente lo ha dejado todo hecho un erial. Si una sinsustancia como la Chacón va a ser la esperanza blanca, apoyada por una ni-ni como la Pajín, no nos queda nada que tragar..
    PD.- ¿Madina aprovecho para aprender idiomas, al menos?

    Comentario escrito por galaico67 — 07 de diciembre de 2011 a las 10:40 am

  14. En el otro extremo de la Galaxia tenemos a Gerardo Iglesias que bajó a la mina después de pasar por la política o a Julio Anguita que hizo lo propio con su plaza de profesor. Y hablando de plazas, si miras en la otra esquina del cuadrilátero tenemos un montón de funcionarios en excedencia. Casi todos los dirigentes del PP son abogados del estado (y algún que otro inspector de hacienda o registrador de la propiedad) y luego está la «puerta giratoria» entre la empresa y la política.

    Si no lo he entendido mal, la culpa no es de los trepas que solo van a lo suyo ni de los tontos votantes que los eligen. Es el sistema que le pone la alfombra a los «cachorros del partido» y pone piedras en el camino de los buenos profesionales. En la derecha está claro que la patronal utilice la puerta giratoria para equipar los cuadros de su partido. Lo natural en un partido de izquierdas sería el acceso de los trabajadores a la política a través de los sindicatos, quizá ahí esté al problema. Serán los estatutos, serán las listas cerradas o será la propia administración plagada de cargos de confianza donde debería haber funcionarios profesionales, el caso es que con cada generación va a peor.

    Hablando de generaciones, ayer se clausuró el congreso federal del SPD alemán donde todos se aplaudieron mucho a sí mismos y ya se ven en la cancillería ahora que han visto un hueco en el carril izquerdo. Lo que me llamó mas la atención es que el número de afiliados desde los 70 se ha reducido a la mitad y la media de edad es de 58 tacos. También tienen su pequeño vivero de flores de invernadero, los Jusos, para que no les falten posaderas con las que rellenar sus poltronas.

    Comentario escrito por emigrante — 07 de diciembre de 2011 a las 11:29 am

  15. con todo lo terrible que es lo expuesto, aun queda lo peor, que es que estos profesionales de la política copan los puestos- y sueldacos anexos- de «asesores» por lo que los políticos se ven privados de una voz con conocimiento que les expliquen las consecuencias de los actos y decisones que toman y que no toman, con los éxitos de las diferentes medidas (ver economia, por ejemplo) con las que nuestros gobiernos asombran al mundo

    Comentario escrito por pescadilla — 07 de diciembre de 2011 a las 12:57 pm

  16. Fenomenal el artículo. Y creo que cualquiera que más o menos haya mostrado interés por la política de joven conoce casos así. Yo me sé de una diputada (cabeza de lista incluso) que fuera del partido lo único que ha hecho es dejar el doctorado a los 6 meses de empezarlo… porque la política le quitaba mucho tiempo.

    Me gustaría añadir que mucho de esta mentalidad hay también en las criticas al 15-M: «Lo que tienen que hacer es «participar en la politica» a través de un partido. O sea, pasarse años pegando carteles y acudiendo a reuniones insufribles hasta que llegue tu momento, como hemos hecho nosotros»

    Comentario escrito por Superpato — 07 de diciembre de 2011 a las 1:03 pm

  17. Me quedo con dos puntos

    – «Para controlar el partido, han de estar dedicados en exclusiva a él, y desde muy pronto»

    – «aquellos que sí que tienen una carrera profesional ajena a la política tienen menos tragaderas que los profesionales, y menos tiempo»

    En el fondo, dedicarse a la política es como un embarazo, se hace muy difícil la conciliación. De manera que sólo los trabajadores que tienen garantizado la vuelta a su puesto se animan a esta aventura (casi solo los funcionarios o los empresarios de alto nivel). Quienes se dedican a ella en exclusiva juegan con ventaja y tienen más incentivos para seguir en ella. Es como la diferencia entre un deportista amateur y uno profesional. Si el problema es la dedicación exclusiva permanente, cómo evitarlo?

    De vez en cuando sale el debate de si habría que limitar la presidencia del gobierno a dos legislaturas, no creo que sea ese el problema pero quizá lo que habría que hacer es limitar la duración de los cargos remunerados dentro del partido o hacerlo de forma rotatoria. Para que no se convierta en una dedicación para toda la vida, al fin y al cabo con sólo dos legislaturas ya tiene derecho a una pensión.

    Comentario escrito por emigrante — 07 de diciembre de 2011 a las 2:03 pm

  18. Me sumo al aplauso y además añado dos cositas. Los partidos pequeños pasa menos, pero cada vez hay más gente que solo a trabajado en y para el partido. Al mismo tiempo cada vez más los partidos (sobre todo de izquierdas) están compuestos en su mayor parte por funcionarios y cada vez es más raro encontrar a obreros ( no hablo de proletarios del XIX sino de currantes corrientes) que no se sienten representados por unos partidos que deberían ser los suyos. Conozco el caso de una lista municipal (de mi partido EU) en el que el 75% de sus componentes eran funcionarios de educación. Esto no es bueno ni para el partido ni para la sociedad. Por otra parte cada vez se ve más la figura de «hijo/a de Fulanito». Ejemplo en las Cortes Valencianas tenemos a Luis Díaz Alperi (Ex alcalde de Alicante) y su hija.

    Comentario escrito por TABALET I DOLÇAINA — 07 de diciembre de 2011 a las 3:37 pm

  19. Buen artículo, de hecho, es un argumento que refuerza mi idea de que lo mejor son las circunscripciones unipersonales… ¿no debilitaría esto la partitocracia?

    Sí, se laminarían opciones minoritarias, pero sabrías que tus vecinos votan masivamente a Pajín o «pijo del PP» que vee pelis en su escaño que prefieran…

    Saludos.

    Comentario escrito por asertus — 07 de diciembre de 2011 a las 8:30 pm

  20. Yo, es que cuando leí el artículo de «El pais» el pasado Domingo me escojone vivo de la pura risa.Bueno, que leches, eso no es aun artículo. Es un publireportaje puro y duro. Ver ahí a gente como Pajín o Madina que ha hecho de todo en las dos pasadas legislaturas poniendo dientes para posicionarse en pimera fila para lo que viene, no se si es hilarante o patético, no lo pongo claro. Y de Óscar López, que vamos a decir. Alguien que ha cosechado consecutivamente los peores resultados del PSOE en Castilla y León en toda su historia, y cuyo mayor hito ha sido ser uno de los fontaneros de la ya legendaria campaña de Rubalcaba.

    Orillando ya un pelo todo esto, a mi me parece que el diario de PRISA ha perdido desde hace tiempo el respeto a la inteligencia de sus lectores, si es que se piensa que la tienen. Desde la designación de Rubalcaba es que el 90% de sus piezas en política dedicadas al PSOE no es que tengan tufillo partidista, es que apestan a estar completamente teledirigidas desde el partido, con mención especial las de los Komisarios Anabel Díez y Fernando Garea. Y con esta última, creo que ya se han pasado tres pueblos merced a la ya comentada inclusión de Hipatya.

    Comentario escrito por John Constantine — 08 de diciembre de 2011 a las 10:03 am

  21. En un pais católico pasariamos de la partitocracia al clientelismo – aun mayor del que tenemos- en un plis-plas. Es una solución que ya hemos probado y tampoco dió resultado.
    No se si has leido las últimas declaraciones de los «abuelos de la patria» : el diablo está en las circunscripciones, que asegura buenos resultados a dos partidos y arroja al averno a los demás, reduciendo los incentivos para que esos dos evolucionen. Basta con enrocarse, sentarse a ver pasar el cadaver de tu enemigo ó hacer la siesta y leer el marca, que con apoyo mediatico suficiente vuelve arriba en una ó dos legislaturas.

    Comentario escrito por galaico67 — 08 de diciembre de 2011 a las 10:11 am

  22. Después de ver a la ministra italiana llorando por los recortes y con la cantera de políticos que tenemos a uno le da que pensar, a lo mejor no son tan malos los tecnócratas.

    Comentario escrito por emigrante — 08 de diciembre de 2011 a las 2:13 pm

  23. Habiendo visto los partidos de izquierda por dentro en los años 1980 (cuando uno era todavía un escolar) y ahora, no puedo más que aplaudir al articulista por haber afinado perfectamente. De aquellos abogados laboralistas, profesores de instituto y de universidad, pequeños empresarios o trabajadores por cuenta ajena a los ‘profesionales’ de ahora va un mundo. Siquiera los ‘sindicalistas’ de pie de calle, los que no viven colgados del gotero de la ubre del estado, tienen ninguna opción de llegar arriba. Se les nota en su alejamiento de la realidad social, en su mediocridad intelectual que se revela al tomar la palabra. Incluso se ve cuando le encargan el programa o el documento marco a un comité de gentes de la universidad y el ‘mundo real’ (como hizo el Sr. Alarte en las autonómicas) y lo reciben y lo pasan por la centrifugadora de la gramática parda, las frases sinsustancia y el encefalograma plano de los asesores y profesionales. Lo que sale es realmente triste. Y así nos va.

    Comentario escrito por Baturrico — 08 de diciembre de 2011 a las 8:29 pm

  24. Excelente artículo.

    A los sufridos súbditos del reino, el único consuelo que nos quedará esos días es reírnos de la desgracia de buena parte de los profesionales del PSOE.
    En breve, el PP empezará a expulsarlos de ministerios, subsecretarías y delegaciones territoriales. Esos daminificados se unirán a los que en el último año han ido perdiendo su chollo en CCAA’s, diputaciones y ayuntamientos (y todavía quedan Andalucía y Euskadi por perder). Además de los cargos institucionales, se perderán los de observatorios, corporaciones, institutos diversos,… Una auténtica debacle, la magnitud de la tragedia se puede observar sobretodo en Catalunya, donde en 12 meses han pasado del «casi todo» al «casi nada».

    Como bien sugiere el artículo, la mayoría de ellos habrían tenido muchos problemas para colocarse en el sector privado en tiempos de bonanza, ahora lo van a tener realmente complicado cuando tengan que competir con gente mejor preparada, más dispuesta a madrugar y que sabe vivir con 1000 € mensuales.

    En fin, no es que a mi eso me sirva de gran cosa, pero como en este país hemos desarrollado una gran habilidad para solazarnos con la desgracia ajena, por lo menos me alegrarán un poco el día cuando me los encuentre detrás mío en la cola del INEM.

    Comentario escrito por Lluís — 10 de diciembre de 2011 a las 11:37 am

  25. Gran articulo. La exigencia será en el futuro mayor y si siguen por ese camino volverán a estrellarse y quizás ya no se levanten nunca más. Las listas abiertas y la limitación de mandatos seria una buena forma de mitigar el problema.

    Comentario escrito por David — 11 de diciembre de 2011 a las 3:16 am

  26. Para evitar que tengamos a estos profesionales de la palabrería, algunos pedían pruebas de habilitación para los políticos… pero eso ya se acercaría a lo que ironizaba Borrell hace poco: «Si preferimos los tecnócratas a los políticos, tendremos que hacer oposiciones y no elecciones.»
    Difícil dilema éste.
    Peor dilema puede ser para el PSOE acabar como la ‘sinistra’ italiana, si no espabilan y se dedican a pensar en ideas y no en personas (al respecto, buen artículo el de Sol Gallego Díaz hoy en el diario de PRISA).

    Comentario escrito por Baturrico — 12 de diciembre de 2011 a las 12:22 am

  27. LLuis,

    Parece que te han leido. Hoy ya andan humillándose -no se me ocurre palabra que encaje mejor- en Madrid.

    No identifican a los diputados.

    http://www.elpais.com/articulo/espana/Gomez/amenaza/expedientar/exdiputados/PSM/reclaman/dinero/Asamblea/elpepuespmad/20111212elpepunac_2/Tes

    Comentario escrito por Borja — 12 de diciembre de 2011 a las 1:22 pm

  28. Totalmente de acuerdo con lo que cuentas, Guillermo. De hecho, a mí me parece que este problema que tenemos con nuestro sistema de partidos es lo más grave desde un punto de vista democrático que ocurre en el país.

    Además, será quizás porque soy injusto con ellos por exigirles más (por cercanía) o será porque es verdad, pero el panorama me parece especialmente inquietante en el PSOE. Mucho más que en el PP. Y me deprime constatarlo así, día tras día, tanto en mi ciudad, como en mi Comunidad Autónoma, como en los líderes nacionales. Aviada va la izquierda española (o la «izquierda» española, si se prefiere) como siga en ese plan.

    (muy de acuerdo también con tabalet cuando explica, para rematar, el problema de IU con el «secuestro» que sufre a manos de sindicalistas de la función pública).

    Comentario escrito por Andrés Boix Palop — 12 de diciembre de 2011 a las 1:56 pm

  29. Andrés, por aquí (Euskadi) la impresión es similar en cuanto al personal que hay en el PSE. Yo creo que, al margen de ideologías, tú preguntas por aquí a ver en qué partido hay más chupópteros profesionales, y la mayoría te diría que en el PSE. El propio Lehendakari López, su segundo Ares, Elorza, Zabaleta, Pastor, Prieto… a ninguno se les conoce otra actividad. Aunque bien es cierto que, con la mierda de la violencia, aquí tampoco eran fáciles procesos regenerativos, porque quieras que no meterte en política era un marrón de la hostia.

    Comentario escrito por kirikiño — 12 de diciembre de 2011 a las 2:45 pm

  30. Kirikiño, en Valencia no hay violencia que valga y el resto de partidos tienen también a sus asquerosillos profesionales de la política, vale, pero de vez en cuando también a algún otro. Pero es que el PSPV, joder, es un puto comité de empresa de gente que no ha hecho otra cosa en la vida.

    Comentario escrito por Andrés Boix Palop — 12 de diciembre de 2011 a las 6:14 pm

  31. ¿No os da la impresión, también, que es en el PSOE donde más sangrante resulta la figura del político profesional porque es donde más claramente se produce el cambio de paradigma de los conocimientos asociados al ente «político»?

    ¿dónde, y quizás es más una sensación, resulta más evidente el deslizamiento general del pensamiento desde el entorno de estudios de las ciencias políticas hacia el del marketing?

    Lo digo porque, a mi parecer, la figura de este político profesional lleva existiendo algunos años, sobre todo en ayuntamientos y así; y es sin embargo esta generación de este PSOE la que la está haciendo más insufrible para la gente.

    Comentario escrito por varo — 12 de diciembre de 2011 a las 8:15 pm

  32. Puede ser un problema de «estructura», por llamarlo de alguna manera. Mientras en el PP hay una especie de patrocinio, por el que los dirigentes se van ligando unos a otros y solo llegan arriba una vez alcanzado un nivel – por lo menos la carrera acabada, quizá un par de años trabajando en un departamento público, sea enchufado, sea con contrato temporal ( no veo yo tantos «figuras» capaces de aprobar una oposición…), como forma de foguearse…- , en el PsoE tenemos aparatchiks desde la cuna, que ya no es que se vinculen a un «patrocinio», es que vienen promocionados directamente por papi y mami, y cuyo mayor mérito es trabajar en las juventudes.
    Quiza sea porque la secular hambre de euros que padecen las filas socialistas les incapacite para dejar libres puestos de segundo escalón en Ayuntamientos, Autonomías y Europa donde se podrían formar los nuevos dirigentes…

    Comentario escrito por galaico67 — 13 de diciembre de 2011 a las 10:17 am

  33. ¿alguno ha tenido la experiencia de afiliarse a un partido mayoritario cuando ya no va a cumplir los 30 años con la ingenua idea de luchar por el cambio desde dentro? lo primero que ocurre es que confirmas punto por punto el articulo de Guillermo. Lo segundo, que como en otros campos de la puta vida, si no tienes buenos padrinos que te conecten a otro nivel organizativo superior a la agrupación de barrio para lo único que te quieren es para trabajar en las campañas y que opines lo menos posible, vamos como en un currante subalterno, pero gratis. Tragaderas enormes que sólo quien lleva en la Orden desde que tenia bozo puede tolerar, lavado de cerebro mediante. Y al final pérdida de tiempo y la melancolia de los esfuerzos inutiles.
    Los partidos se han convertido en sistemas de privilegio y poder cerrados, una especie de estado afiliativo y antidemocratico dentro del estado, del quien monopoliza sus resortes y su pasta. Un Opus Dei laico y bipolar.

    Comentario escrito por casiopeo — 13 de diciembre de 2011 a las 11:49 am

  34. Ay, Casiopeo, cuánta razón tienes. Eso sí, puedes hacer terapia de grupo con los llegados ‘de mayor’ y quejarte de lo mal que está todo, que es algo muy español.
    Y a Galaico67, lo que indica en su último párrafo sería así -véase la carrera de Sáenz de Santamaría o de algún otro cargo intermedio del PP-. En lo que es ‘vivero de políticos y gusto por las peseticas’, recuerdo a la gente que se movía en el PSA (ahora PSOE) y se maravillaba de lo buen chico que era Roldán, y la sorpresa que se llevaron todos después de su ascenso fulgurante. Entre tanto, el PCA (luego IU de Aragón) y el movimiento vecinal ‘criaban’ a algunos competentes cuadros medios como la Dra. Gral. de prisiones, ‘reciclada’ desde el ayuntamiento de la inmortal ciudad de Z.
    Ahora el movimiento vecinal se llama ‘fútbol’ (o ‘falla’ en Valencia, con lo que eso significa) y los potenciales políticos formados como técnicos o cargos medios municipales o inspectores de enseñanzas medias o vicerrectores de universidad no son ya siquiera del PSOE. De esos polvos, los lodos que describe el Prof. López en su brillante artículo.

    Comentario escrito por Baturrico — 13 de diciembre de 2011 a las 12:37 pm

  35. Muy bien, y es oportuno hablar de esto, curiosamente en las universidades se meten ‘profesores’ externos -no sé bien como los llaman- para que aporten una visión más pragmática y próxima a la realidad inmediata… de algo parecido habla este artículo.
    Y sí, el problema vino cuando cobró el 1er Alcalde.
    ¡No desistas Guillermo!

    Comentario escrito por Álvaro Pichó — 13 de diciembre de 2011 a las 2:14 pm

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