Pensando en los más débiles

El Impostor sigue dando muestras de inequívoca fidelidad al compromiso con los más débiles que anunció en el breve momento de su discurso de investidura que no dedicó a insultar y criticar al resto de formaciones políticas. La semana pasada la flamante Secretaria de Estado de Inmigración -aterrizada en el cargo después de abandonar la Delegación de la generalitat en Bruselas provocando toda suerte de comentarios por aquí con la coletilla «las ratas son las primeras etc.»- anunció una nueva medida contra la crisis: reducir en un 65% los recursos del estado destinados a la integración de los inmigrantes.

Como es observable, el compromiso social del Gobierno no da tregua, y el que lo dude tiene un buen ejemplo en la reducción, de 200 a 70 millones de euros, de las ayudas. Para que se quejen los mercados… Eso sí, hay que agradecer una vez más las políticas sociales del brazo político de los GAL. Podrían haber dejado la partida en 70.000 euros, o incluso en 70, pero no: ahí están esos generosos 70 millones. Y eso que, según anunció el mes pasado por sexta vez el Impostor, lo peor de la crisis ya ha pasado, lo cual quiere decir que en estos momentos debemos estar en lo mejor de la crisis.

El anunció coincidió, además, con el anuncio de diversas fusiones en las cajas controladas por eminencias políticas del PPSOE, que serán generosamente regadas con dinero público, siempre con el fin de promover el empleo, especialmente el empleo altamente cualificado. Con ello me refiero a la española manera de hacer fusiones, consistente en despedir tanto como se pueda -si puede ser tirando de recursos públicos vía pre-jubilaciones- para, al mismo tiempo, hacer organigramas espeluznantes en los que ni un sólo jefe de todos los entes fusionantes se quede sin sillón. En fin, es bonito ver que los recursos públicos se usan bien, como no podía ser de otro modo teniendo en cuenta que nos mandan gente de progreso de esos luchan contra los supervillanos que quieren desregular los mercados y permitir que haya empresas capaces de crear agujeros gigantes.

Cambiando de tema, y en un nuevo ejercicio de responsabilidad coherente con las ideas que defiende  en público, el Gobierno del Reino sigue adelante con sus pactos de estado para salvar la economía. Como ustedes saben, el Gobierno pretende aprobar tales pactos por un mecanismo que es todo él talante y espíritu dialogante y que se llama decreto. Sin embargo, como hasta la fecha los floreritos del presidente, perdón, los Ministros encargados de las negociaciones, sólo han sido capaces de pactarse encima sin que nadie les haga demasiado caso, han pospuesto la fecha de aprobación del papelito hasta después de vacaciones.

Siento haber perdido el link del papelito pero, como decía, era todo un primor. Además de las imprescindibles ayudas al ladrillo en forma de rebajas del IVA que nos han subido a los más ricos -concretamente, a los 45,5 millones de españoles más ricos-, lo más novedoso es la prórroga del decreto que, justo antes de que sonara la campana en 2008 provocando una cascada de quiebras, hizo el Gobierno para que las empresas con fondos propios negativos -esto es, ese mogollón de compañías que la depreciación de activos básicamente del ladrillo ha convertido en zombies quebrados- puedan seguir operando sin ningún problema, en plan pelillos a la mar. Huelga decir quela exigencia de concurso para compañías en tal situación se daba por el motivo de que no es muy prudente tener la economía llena de compañías que en cualquier momento pueden desaparecer, zas, como ninjas, dejando un rosario de proveedores, clientes y trabajadores con una mano delante y otra detrás. Sin embargo, el Gobierno partidario de la regulación tiene ideas diferentes -sin duda por aquello de ayudar a los más débiles- al respecto, y por ello promueve un fuero tras otro a mayor gloria de la funesta alianza de la banca con el ladrillo y el envidiado milagro económico español.

Pero ojo, eso sí: a tope con los inmigrantes y contra los especuladores…

20 Comentarios en “Pensando en los más débiles”

  1. Jordi P. (de antes),

    Obiols colaboró en esa campaña porque siempre ha sido eso, un hombre sin carácter, leal al partido y que no tiene mayor reparo en comulgar con ruedas de molino. ¿Como político? Flojillo, flojillo. Difícil saber qué ideas tenía… si es que tenía alguna. Para liderar un proyecto político, hacen falta, entre otras cosas, capacidad de liderazgo y de comunicación. Y mucho menos si eres el jefe del primer partido de la oposición, al final se oia más a los de IC y a Vidal-Quadras (ese, al margen de su ideas, les daba 10 vueltas a la mayoría de sus colegas de parlamento) que a los del PSC.
    Que Pujol aguantara tanto también es, en parte, mérito de la oposición.

  2. Sobre lo de hoy,

    A riesgo de parecer cínico, lo cierto es que la banca y el ladrillo es, junto con el turismo, lo único que tenemos hoy. El turismo parece gozar de algo más de salud (que los empresarios del sector a la mínima están llorando pidiendo ayudas, y de momento no se les oye).

    Cambiar el modelo económico español no es algo que se pueda hacer en 6 meses ni en 2 años, requiere un proyecto a largo plazo y, por lo pronto, nadie está por la labor, ni siquiera se ha atrevido nadie a abordar la reforma de los sistemas educativo y laboral. Con bancos cargados de activos tóxicos y empresas en situación de quiebra técnica, sólo que se caiga alguna ficha se producirá un efecto dominó. Y no serán precisamente Florentino, Botín o Díaz Ferran los que acabarán hurgando en los contenedores para poder comer…

  3. Lluís,

    Yo no estaba valorando a Obiols como líder. Es cierto que su liderazgo era muy débil. Como teórico del partido era uno de los mejores que tenían a nivel del estado español. Esto no lo digo yo, lo decía Felipe González.

    Para acabar de discrepar un poco con tu valoración de los políticos, yo creo que no todos tienen que tener el mismo perfil. Igual que en un equipo de fútbol hay buenos jugadores en cada posición, lo mismo pasa en un partido. El problema del PSC es que puso como delantero a un jugador de centro de campo y efectivamente no marcaba goles.

  4. Leía hoy en el Períodico que por primera vez la morosidad bancaria supera a la de las cajas de ahorro. (un 10’59 frente a un 9’80 y pico).

    Salía el otro día en uno de los diarios del Reino, de los que van de «izquierdosos» y no son más que panderetas y panfletos que las Hipotecas en España no funcionaban como en USA sinó que aquí la dación en pago no bastaba para liquidar la deuda con el banco… y el río de tinta (o de grafías electrónicas) que fluyó fue espeluznante.

    Cambiando de tercio, respecto a las ayudas para la inmigración, se debe entender que es otro de los talones de aquiles de nuestro gobierno. NO puedes hacer un efecto llamada como el que se produjo hace un lustro con el «papeles para todos», y luego pretender tener todo regularizado. EL problema de la inmigracion es un problema de base, de legalidad. Existe gente que cree que la inmigración es mala, y eso no es cierto, es la inmigración ilegal la que causa el mal ejemplo. No es lo mismo el inmigrante que viene con un contrato bajo el brazo que el que entra por barajas.

  5. Jordimercado,

    No creo que el «papeles para todos» fuese tan nefasto, por lo menos en su aspecto teórico. A fin de cuentas, se trataba de gente que ya estaba aquí, la mayor parte intentanto ganarse la vida como honradamente podía. Y había que demostrar que se llevaba un tiempo viviendo en el país, si mal no recuerdo.

    También hacían un «efecto llamada» todos esos empresarios que contrataban emigrantes por cuatro duros y sin papeles. Sabías que podías venir si más, sin todo el papeleo necesario para hacerlo de forma legal, y tenías posibilidades elevadas de encontrar trabajo. ¿Explotado y mal pagado? Si, pero en Marruecos, Rumanía o Perú todavía lo tenían peor. Y nadie ha hablado demasiado de ciertos «empresarios» que contrataban gente sin papeles (y sin cotizar SS), o que les cotizaban únicamente por 10 horas cuando trabajaban 50. Pero claro, como esos empresarios eran los artífices del milagro económico español y de meternos en la champions, nadie les decía nada… Y el emigrante, como sabía que había trabajo, llamaba a sus hermanos, primos, cuñados,…

  6. Jordi P.,

    Para un líder como Felipe González («Dios», para los que querían hacer carrera en el partido), un político bueno es el gregario sin ambición. El que aspira a ser califa en lugar del califa no goza de tanta consideración, a fin de cuentas a lo que aspira es a moverte del sillón y al final se trata de la lucha por la supervivencia.

    Lo normal, para un político que ha dado los codazos suficientes como para ocupar un puesto relevante, es aspirar a lo máximo. El que no tiene aspiraciones personales se queda de concejal, diputado de base o con algún cargo interno dentro del partido. Si llegas a «barón regional», ministro, portavoz parlamentario,…, es que te lo has currado, has dado codazos y los has dado bien.

  7. Para los que dicen que el Gobierno no cumple, ZP ha colocado a la chica con síndrome de Down que le exigió trabajo en TVE. Concretamente, en el laboratorio de ideas sociata:

    http://www.hoy.es/20091220/sociedad/trabajo-nina-zapatero-20091220.html

  8. Sí, Popota, pero no te engañes, han hecho parecer que el favor se lo hacían ellos a la chica, pero en realidad están flipando porque están comprobando que es la persona más válida y preparada que hayan tenido nunca en sus filas.
    Esta vez parece que les ha salido bien lo de integrar a una persona con minusvalía, con Hipatia de Benidorm se les fue de las manos, les salió ambiciosa la muchacha…

  9. «Para los que dicen que el Gobierno no cumple, ZP ha colocado a la chica con síndrome de Down que le exigió trabajo en TVE. Concretamente, en el laboratorio de ideas sociata:»

    Este país es una puta parodia.

    «NO puedes hacer un efecto llamada como el que se produjo hace un lustro con el “papeles para todos”, y luego pretender tener todo regularizado. EL problema de la inmigracion es un problema de base, de legalidad. Existe gente que cree que la inmigración es mala, y eso no es cierto, es la inmigración ilegal la que causa el mal ejemplo. No es lo mismo el inmigrante que viene con un contrato bajo el brazo que el que entra por barajas»

    Perdoname el marxismo de salón, pero a mí me da que es el capital el que moviliza a la fuerza de trabajo y no lo opuesto. Así, que mi impresión es que el efecto llamada de las regularizaciones son los padres. Es más, las regularizaciones masivas también son los padres. Lo de los contratos en origen y demás es muy bonito, pero no es el interés de sectores imprtantes de empresarios, políticos e incluso trabajadores. La irregularidad, que no es más que una forma encubierta de esclavitud (peor que la esclavitud oficial del siglo XIX en lo que respecta a condiciones y a hipocresía) ha alimentado a la economía española durant la época de bonanza. Joder, que vivimos en un país con, al menos, una economía sumergida equivalente al 20% del PIB. Es engañarse pretender que la economía irregular no ha atraido trabajadores. Así, que el «papeles para todos» habría sido un buen camino para luchar contra est irregularidad, y exacatamente el camino «para tenerlo todo regularizado», no veo dónde ves la contradicción. Pero en ese caso, las fresas habrían sido más caras y los sueldos en España más altos.
    Sin embargo, esa idea tan extendida de que es, o era, facil entrar en España y reglarizarse no se corresponde con la relidad, al menos con la realidad que yo conozco. Mi impresión es que la ley de extranjería estña diseñada hace mucho tiempo para mantener una cuota amplia de irregularidad, para crear limbos legales y laberintos normativos donde se garantice que un inmigrante pueda trabajar sin qe las autoridades toquen las narices mientras se le dificulte la normalizacipnj de su situación. Y esto no es cosa de ZP, que por supuesto lleva su parte de culpa, sino que es algo sistémico y que ha beneficiado a mucha gente, pero no procedente de desiertos lejanos ni perdidas montañas.

    «¿Explotado y mal pagado? Si, pero en Marruecos, Rumanía o Perú todavía lo tenían peor»

    O no. La emigración económica existe, pero no es la única, y no estoy seguro de que sea la mayoritaria. Haciendo un simil un poco cutre , ¿nunca has cambiado de trabajo por otro con mejores condiciones? Pero esto no implica que en el anterior «lo tuvieras peor» en un sentido dramático. La sociedad global ha creado motivaciones y deseos nuevos en todas partes, para bien o para mal, y en determinados sitios son más difíciles de satisfacer.

    Un saludo.

  10. Bah,

    Da la casualidad que conozco a bastante gente de Rumanía.
    En Rumanía, podías aspirar a sueldazos de 300 € mensuales, que era la media del país. Eso si, buena parte de productos de consumo, al mismo precio que aquí o más caros. Claro que eso era antes, la crisis también les ha afectado y es difícil encontrar trabajo, a cualquier precio.
    No conozco tan bien la situación en Marruecos, pero solo tienes que mirar los datos del PIB; ni que estuviese bien distribuída la riqueza nacional, no da para demasiado.

    La verdad, conozco pocas personas, en su sano juicio, capaces de aguantar lo que tienen que aguantar aquí si no fuese estrictamente necesario para poder vivir.

    Tampoco niego que exista el clasico aventurero que quiere ver mundo, pero es una opción muy minoritaria. Ningún aventurero contempla la posibilidad de pasarse años doblando el espinazo por una miseria en un hibernadero, o servir copas a e €/hora los sábados por la noche.

  11. Lluis, yo también conozco a gente de Rumanía (de hecho vivo en donde se encuentra una de sus principales comunidades en España), y sobre todo a muchísima gente de Perú, al que mencionabas antes, además en este caso por lazos de familia política. Pero además, aunque no me dedico a esto, trabajo con gente que se dedica o se ha dedicado a estudiar los fenómenos migratorios. Cuando digo que no necesariamente están peor en sus países de origen, no me refiero a aventureros, ni a caprichosos.
    Las motivaciones para migrar son de lo más diversas, pero el hambre y la desesperación no es la mayoritaria. La gente en esas situaciones suele buscar soluciones lo más rápidas posibles, por simplificar la cosa.

    Tú mismo has señalado algún factor, como el acceso a bienes de consumo, o lo que aguantan aquí (que no lo aguantaban allí). Los datos del PIB son significativos, pero ten en cuenta que en socidades donde el mundo rural tiene más peso, esto hay que cogerlo con pinzas, porque en el campo siempre se puede recurrir al autoconsumo. Lo que ocurre es que no pueden acceder a otros bienes que nosotros consideramos habituales. Es cierto que notoda la migración es de origen rural y en el retrao varía, pero está observado que la spersonas con más tendencia a migrar no son las que peor están.

    Entran en juego las limitaciones de la propia sociedad de origen, no en vano suelen emigra las personas más jóvenes, que tienen una mentalidad más apta y unas aspiraciones concretas que dificilmente podrán satisfacer en su lugar de origen. No es aventurismo, es el dseo de vivir como tú y como yo, aunque la cosa suela quedar en un fracaso. Por ejemplo, si quieres montar un negocio en Perú, o envir a tus hijos al colegio en Chiapas, lo tienes muy difícil. En el primer caso, la emigración a un país donde las espectativas (reales o percibidas) sean mejores es una opción, esto dejando a un lado a corrpución, el sistema político etc. En el segundo caso endeudarse es otra opción. Ambos casos pueden impulsar a una persona a emigrar. Pero dada las condiciones que van a tener que soportar en el lugar de destino, decir que van a estar mejor me parece poco apropiado, aunque por supuesto hay casos y casos. Otra cosa es que las espectativas, como digo, siempre van a ser mejores en un país desarrollado en el que aparentemente hay oportunidades

    Otro problema, sobre todo cuando la gente que trabaja estos asunos tiene que trabajar con entrevistas personals, es que muchs migrantes no van a aceptar que su proyecto ha sido unf racaso y que no han coseguido lo que esperaban, esto es, que están pasándolas putísimas por mucho menos de los que esperaban. Por supuesto, la posibilidad de que tus hijos vayan a vivir como la gente del país de destino, o de aguantar el tirón y, si se ha ahorrado, hacerse una buena casa y comprarse una tele de plasma. También está la gente que lo pasa muy mal aquí para que su familia esté mejor allí, estos tampoco están mejor aquí, pero hacen el sacrifico por vínculos familaires o comunitarios. Y por supuesto, al experiencia de migrar cambia a la gente, infñluye en su mentalidad e identidad, de modo qu cuando vuelven a sus países deorigen muchas veces se sienten de algún modo extranjeros en ellos, lo que afecta a las posibles comparaciones.

    Con esto no estoy queriendo decir que los inmigrantes vengan por capircho, o que en sus países de origen vivan estupendamente, y como diej, la emigración estrictamente desesperada también existe. Lo único que quiero decir es que las causas de la emigración son más complejas de lo que se suele pensar, y desde luego no se corresponden con el mito buenrrollista de la gente muriénose de hambre golpeando las puertas de occidente, porque los que viven fuera Schengen también son seres humanos, con sus dobleces y aristas. Y que el malestar, las frustraciones y las necesidades percibidas por una persona están influídas también por muchas cosas, como nos ocurre a nosotros con esas necesidades que en un sentido estricto de supervivencia son totalmente prescindibles, pero esto no las convierte en caprichos.

    Espero explicarme.

  12. Bah,

    Creo que he entendido lo que quieres decir.

    Pero a fin de cuentas, el que emigra suele ser porque no ve otra salida. Te vas a un país donde sabes que te tratan mal (te lo cuentan los que han emigrado), tendrás dificultades con el idioma (exceptuando latinoamericanos) y jamás te van a considerar uno de los suyos.

    Evidentemente, los que emigran son los más hábiles y/o los más decididos, lo mismo que aquí cuando se trataba de emigrar a Alemania o Suiza en los 50. Y no, no se trata de gente que se esté muriendo literalmente de hambre, pero sus problemas son algo más graves que no tener una tele de plasma. En el fondo, lo dices tú mismo, buscan una mejora para si mismos o para sus familias, mejora que en su tierra no pueden alcanzar.

    En algún caso, la emigración es solo temporal. En mi caso personal, alguno de mis conocidos lo que buscaba era ahorrar algo para poder establecerse en su país, por lo que ni siquiera se plantea quedarse en España más tiempo del imprescindible para conseguir sus fines.

    En definitiva, casi nadie emigra en esas condiciones por gusto. Otra cosa es la emigración de técnicos cualificados.

  13. Cuando hablaba de esto no era una critica al emigrante, sino al meollo montado por los empresarios, los cuales se han estado llenando la boca de «precios europeos» y demás lindezas cuando en realidad han puesto los precios europeos a cotas laborables de Perú, Marruecos o China… es a eso lo que me refiero, y todo con el beneplacito del que está en Moncloa.

    Lo comentaba en post anteriores, como es posible que en el resto de la UE existan empresarios? Los del grupo de Diaz Ferran aseguran que el despido es carisimo (y vamos hacia los cinco millones de despedidos) y demás. No será que lo que se tendría que modificar no es el coste del despido sinó la inflexibilidad propia del incompetente? Porque como digo no se entiende que en europa haya empresarios, si con los costes laborales que tienen en España ya están llorando, cuanto llorarían estos señores en paises serios?

    Y el efecto llamada se ha producido y con él un gran problema del alza del populismo, que mueve la bandera de «ellos gastan más» y demás.

    Por otro parte, no era lógico que si cualquier extranjero (el que sea) venía a trabajar, a los dos años pidiese traer a su padre de 55, a su madre, a sus hijos, a la madre de su mujer, a su suegro, etc… porque es todo este entramado familiar el que produce que exista el populismo, lo que la gente ve es que uno trabaja y trae a toda la familia, que sin haber cotizado nada, ya son receptores de ayudas y prestaciones sociales. Lo mismo sucede con los «irregulares», si en lugar de hacer cumplir la ley con expulsión más o menos inmediata, hacen que, por lo que sea (seguramente falta de personal o medios) se amontonen confinados en los centros, a los 40 días los tienen que liberar, y de vuelta a comenzar. ¿Cuantos aviones o autocares se han fletado para traer irregulares de una parte a otra de España?… en que quedamos, que deben ser expulsados de territorio nacional o deben ser liberados a sus anchas dentro de él. Eso es a lo que me refiero cuando critico al gobierno.

  14. Lo de la tele de plasma era una hipérbole que me ha parecido(seguramente erróneamente) un buen símbolo de lo que consideramos bienestar. Pero por supuesto los poblemas de los migrantes (y los de casi cualquiera, vamos) son mucho mayores y profundos. Pero sí entra aquí la idea de lo que se considera peor o mejor, que además de depender de factores objetivos, se ve también influída por factores culturales, y es ahí donde entran en juego las necesidades no inmediatas (pero legítimas) que mencionaba antes.

    Pero lo de no tener otra salida también hay que usarlo con cuidado. A veces se tiene otra salida, pero esa salida es una puta mierda (para la mentalidad del migrante y por qué no decirlo, la nuestra, aunque no necesariamente la de su etorno) Esto pasa sobre todo en sociedades no occidentales (quiero decir, en el caso de Rumanía, supongo, es menos acusado que en el de Maruecos)en las que conviven formas de vida tradicional con los destellos de la globalización, que les genera expectativas y les enseña otros mundos y otras formas de vivir que a mucha gente le resultan más atractivas que su forma de vida tradicional. Esto puede causar desconteto en la comunidad de origen (y si el que emigra es un hombre casado, genera además un desafío añadido porque la mujer ocupa su lugar) y también en algunas personas (occidentales) que pretenden que haya personas viviendo «tradicionalmente» sólo para tener dónde enjuagar su descontento traído de casa (en Iberoamérica es habitual la broma que dice que la familia indígena la componen el padre, la madre, los hijos y el antropólogo) quitando esto último, que es particular a determinadas culturas, tampoco es nada nuevo, es en definitiva lo mismo que los jóvenes que emigraban del campo a la ciudad porque no les atraía la idea de dedicarse a la labranza, de hecho este es un primer paso habitual (y muchas veces necesario), la migración interna antes de saltar a la externa.

    También encontramos gobiernos que de una forma u otra incentivan la emigración de sus habitanes, porque sus economías dependen de las remesas.

    La emgiración temporal es bastante frecuente, sobre todo en gente con familias. Lo que pasa es que la idea de temporalidad a veces termina cambiando, bien por circunstancias imprevistas, bien porque la mentalidad de la persona cambia tanto en el país de destino que cuando vuelve a casa lo echa de menos, o se siente poco conforme con sus antiguas costumbres o las de sus compatriotas. Por supuesto el efecto de esto seuramente veríe en intensdad según sea la distancia cultural entre luegar de origen y destino. Eso por no hablar del típico caso de gente que acaba teniendo dos familias, una en el país de origen y otra en el de destino.

    Pero sí, por supuesto emigrar no escomo irse de Erasmus. Lo que quiero decir, en resumen, es que, aunque las expectativas del migrante sean, obviamente, las de encontrar una vida mejor (y esto puede significar muchas cosas) no siempre se cumplen y no siempre se fijan en categorías inamovibles en la propia subjetividad de las personas implicadas.

    Un saludo.

  15. «A riesgo de parecer cínico, lo cierto es que la banca y el ladrillo es, junto con el turismo, lo único que tenemos hoy.» Lluís, eso es más o menos opinable. Lo que es menos opinable es que tiene mucho mérito, por decirlo de algún modo, seguir metiendo dinero y desgravaciones y ayuditas allí en banca y ladrillo en un documento que empieza con la siguiente frase:
    «La capacidad de la economía española para recuperar un crecimiento sobre bases más sólidas y, con él, la creación de un empleo igualmente más estable, requiere la adopción de relevantes medidas de impulso y reforma del marco económico vigente.»

    Se puede leer en http://www.cadenaser.com/csermedia/cadenaser/media/201003/25/economia/20100325csrcsreco_1_Pes_PDF.pdf

    Algo, por lo demás, muy recomendable de leer, y que haría bien en hacer la izquierda pija e indocumentada que desecha el papel como si fueran reformitas sin importancia -en comparación, claro está, con la sacrosanta reforma del mercado laboral para abaratar el despido-, cuando los efectos a corto, y especialmente a largo, de reiterar la apuesta por el «milagro económico», son infinitamente más relevantes que los tópicos de barra de bar -de estudiantes de economía de nivel low- sobre la imperiosa necedad, perdón, necesidad, de abaratar el despido.

    Saludos y gracias por los mensajes, muy interesante lo de los subespañoles.

  16. @Jordimercado

    Pero ele fecto llamaa, a mi entender, noe s consecuencia de las leyes, sino que al contrario, éstas son consecuencia del efecto llamada. Si ha habido efecto llamada, éste ha sido causado por la cantidad de puestos de trabajo, formales e informales, que se ofrecían. La gente no va a otro país porque la ley sea permisiva, va porque espera encontrar una fuente de ingresos allí. Claro que Zapatero no ha hecho nada por cambiar la situación, pero cuando él llegó al gobierno el ciclo de inmigración ya había comenzado. En este sentido, las regularizaciones me parecen una buena medida, si lo que se busca es reducir la informalidad, y minimizar en lo posible el efecto de la inmigración sobre los salarios, pero es que las regularizaciones en España ni siquiera iban de eso.

    Si no se quiere una oleada de inmigración que hunda los salarios en un periodo de crecimiento la mejor solución que se me ocure es poner el salario mínimo a 1200€ y actuar de forma seria contra la economía sumergida antes de que empiece a atraer mano de obra, que es, supongo, cuando será más fácil atajarlo. Ya sabemos cómo se han preocupado los sucesivos gobiernos sobre el tema, pero para qué, es mejor, de cara a las elecciones, tener a un señor subvencionado y complementando sus ingresos con chapucillas, que invertir ese dinero en generar puestos de trabajo de verdad y ofrecer trabajo de verdad, con lo cual ese señor en vez de depender de ti va a depender de sí mismo y, oye lo mismo en ese caso no te vota en las próximas elecciones. Y es lo que seguimos haciendo. Esto a pequeña escala, porque a mayor escala ya ni hablamos. La verdad, no me creo que lo problemas sean por falta de personal, o de recursos, porque si faltan se pueden generar, teniendo en cuenta que los beneficios fiscales para el Estado van a ser probablemente mayores que los gastos. Mi impresión es que ha sido falta de voluntad, lo cual no me sorprende viendo el entramado ladrillero-solplayero-político que domina este país. Pero esto tampoco lo inventó Zapatero, que es coyuntural, sino que es un problema de la propia concepción de nuestra economía y de nuestra «democracia».

    Lo de los dos años que comentas es teórico. Para pdoer traer a la familia, primero se necesita esta regularizado e España. Lo que ocurre es que la ley de extranjería española es muy curiosa y me da a mí que de permisiva no tiene nada, otra cosa es que ella misma fomente los cauces «anormales» por.Obtener un permiso de trabajo no es tan sencillo (ni siquiera para extranjeros procedentes de países ricos, excepo de la UE, aún así en agunos sectores dependientes de la administración, como la educación, tampoco es tan sencillo). Si por ejemplo, entras en España con visado de turista y encuenras trabajo, tienes que inciar una serie de trámites para regularizar tu situación que implican volver a tu país para iniciar el papeleo(sin la seguridad de poder volver a entrar en España) y convencer a tu empleador para que inicie los trámites de autorización de trabajo, de modo que se fomenta la irregularidad. Si además tienes en cuenta que para que te concedan un permiso de trabajo se exige que estés residiendo legalmente en España, lo anterior lleva a un círiculo vicioso. Así que al final queda la opción del «arraigo» que implica haber residido, creo, 3 años en España, tener un contrato de trabajo de un mínimo de duración (volvemos a lo de antes) o tener lazos familiares acreditables.

    Así que no me parece que el problema haya sido la regularización masiva, que no fue más que un parche para sortear la acumulación de extranjeros irregulares en un callejon burocrático sin salida y con los que no sé que otra cosa se podrá haber hecho una vez llegados a ese punto.

  17. @Jordimercado

    Pero el efecto llamada, a mi entender, no es consecuencia de las leyes, sino que al contrario, éstas son consecuencia del efecto llamada. Si ha habido efecto llamada, éste ha sido causado por la cantidad de puestos de trabajo, formales e informales, que se ofrecían. La gente no va a otro país porque la ley sea permisiva, va porque espera encontrar una fuente de ingresos allí. Claro que Zapatero no ha hecho nada por cambiar la situación, pero cuando él llegó al gobierno el ciclo de inmigración ya había comenzado. En este sentido, las regularizaciones me parecerían una buena medida, si lo que se busca es reducir la informalidad, y minimizar en lo posible el efecto de la inmigración sobre los salarios, pero es que las regularizaciones en España ni siquiera iban de eso.

    Si no se quiere una oleada de inmigración que hunda los salarios (también habría que ver asta qué punto los ha hundido, en qué sectores, y cuánto ha influído la inmigración en ésto) en un periodo de crecimiento, la mejor solución que se me ocure es poner el salario mínimo a, digamos, 1200€ y actuar de forma seria contra la economía sumergida antes de que empiece a atraer mano de obra, que es, supongo, cuando será más fácil atajarlo. Ya sabemos cómo se han preocupado los sucesivos gobiernos sobre el tema, pero para qué, es mejor, de cara a las elecciones, tener a un señor subvencionado y complementando sus ingresos con chapucillas, que invertir ese dinero en generar puestos de trabajo de verdad y ofrecer trabajo de verdad, con lo cual ese señor en vez de depender de ti va a depender de sí mismo y, oye lo mismo en ese caso no te vota en las próximas elecciones. Y es lo que seguimos haciendo. Esto a pequeña escala, porque a mayor escala ya ni hablamos. Mi impresión es que ha habido voluntad para ello, lo cual no me sorprende viendo el entramado ladrillero-solplayero-político que domina este país. Pero esto tampoco lo inventó Zapatero, que es coyuntural, sino que es un problema de la propia concepción de nuestra economía y de nuestra «democracia».

    Lo de los dos años que comentas es teórico. Para poder traer a la familia, primero se necesita estar regularizado en España. Lo que ocurre es que la ley de extranjería española es muy curiosa y me da a mí que de permisiva no tiene nada, otra cosa es que ella misma fomente los cauces «anormales» porque los supuestamente normales resultan virtualemnte imposibles. Obtener un permiso de trabajo no es tan sencillo (ni siquiera para extranjeros procedentes de países ricos, excepto de la UE, aún así en algunos sectores especiales , como la educación, tampoco es tan sencillo, de modo que, por ejemplo, apenas tenemos profesores nativos de inglés, que prefieren irse a donde no les ponen tantas trabas para ejercer). Si por ejemplo, entras en España con visado de turista y encuenras trabajo, tienes que inciar una serie de trámites para regularizar tu situación que implican volver a tu país para iniciar el papeleo(sin la seguridad de poder volver a entrar en España) y convencer a tu empleador para que inicie los trámites de autorización de trabajo, de modo que se fomenta la irregularidad. Si además tienes en cuenta que para que te concedan un permiso de trabajo se exige que estés residiendo legalmente en España, lo anterior lleva a un círiculo vicioso. Así que al final queda la opción del «arraigo» que implica haber residido, creo, 3 años en España, tener un contrato de trabajo de un mínimo de duración (volvemos a lo de antes) o tener lazos familiares acreditables, porque la otra posibilidad que ofrece la ley (la de los dos años trabajando, con contrato, que mencionas) sólo se puede cumplir en caso de milagro.

    Así que no me parece que el problema haya sido la regularización masiva, que no fue más que un parche para sortear la acumulación de extranjeros irregulares en un callejon burocrático sin salida y con los que no sé qué otra cosa se podrá haber hecho, una vez llegados a ese punto.

    Un saludo.

  18. jordimercado,
    La Ley de Extranjería está hecha expresamente para crear una gran bolsa de trabajadores precarios y explotables sobre la cual edificar el 20% del PIB español que es la economía sumergida.

    El concepto ‘efecto llamada’ era la enésima tontería del PP. Como bien ha dicho bah, era el crecimiento de nuestra economía que abría nuevas oportunidades a los migrantes y por eso migraban, no una Ley que ni es eficiente ni respeta los derechos humanos.

    La imbecilidad mayúscula de esa Ley pretendía no dar oportunidades a la gente que venía a trabajar, haciéndola pasar por el aro más estrecho, y siempre, claro está, con los débiles en mente, claro, consensuando con traficantes y explotadores y beneficiándolos.

    Por lo que respecta a la emigración, en España tenemos una estructura económica a la que le sobran muchos titulados universitarios y muchos trabajadores inmigrantes, oséase, una enorme bolsa de talento y de trabajo que no es capaz de aprovechar para progresar en alguna dirección que valga la pena.

    En ese sentido, la generación que hoy lo acapara todo se dedica a ir sistemáticamente en contra de la siguiente, hipotecándonos el futuro: en la línea del laboratorio de ideas sociata, era bastante cínico que Hereu y Sinde inauguraran el ‘Foro de la Cultura’ o lo que fuera aquel bodrio… estos dos asesinos de la cultura pidiendo licencias a todo lo que huela a andergraun, etcétera, etcétera.
    Con el boicot sistemático de la sociedad a la gente que lucha por sus oportunidades no me extraña que se emigre a otros sitios… Supongo que nunca fue fácil en todo caso.

  19. Perdón por la repeteción, no sé qué he tocado. El «bueno» es el segundo.

  20. Y yo me he leído los dos.